“Lo agarré”, admitió el esquinero de los Eagles, James Bradberry. “Tenía el deseo de que la dejen pasar, pero lo agarré”.

Aún más importante es el hecho de que esa penalidad nubla la vista y el panorama de lo realmente importante. Philadelphia tenía todo para ganar el partido y falló en momentos y aspectos clave y es por eso que mañana despertaremos escuchando la palabra dinastía y leyenda para describir tanto a los Chiefs como a Mahomes, porque han llegado a cinco finales de conferencia consecutivas, porque han ganado dos Super Bowls en cuatro años y porque esto recién comienza.

“Patrick quiere ser el mejor mariscal de todos los tiempos”, concluyó Reid acerca de Mahomes. “Esa es su meta”.