La invasión rusa de Ucrania puede provocar una crisis alimentaria en Medio Oriente y el norte de África, ya que los países que dependen de las importaciones de trigo de Ucrania y Rusia enfrentan escasez, dijo el miércoles el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres.
“Los precios de los alimentos, el combustible y los fertilizantes se están disparando, las cadenas de suministro se están interrumpiendo”, afirmó Guterres durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU.
“Todo esto está afectando más a los más pobres y planta las semillas para la inestabilidad política y los disturbios en todo el mundo”.
Guterres citó a Egipto, Líbano, Libia, Somalia, Sudán y Yemen como naciones que importan al menos la mitad de su trigo de Ucrania o Rusia.
El ataque de Rusia a Ucrania ya ha provocado un aumento en los precios del trigo, lo que se suma a la inflación en los precios de los alimentos. Los futuros de trigo a principios de marzo estaban en su nivel más alto desde 2008.
Rusia y Ucrania juntas comprenden el 14% de toda la producción mundial de trigo y el 29% de todas las exportaciones de trigo.