El ejército ruso llevó a cabo pocos ataques por tierra el domingo, salvo en el Donbás, donde asentó nuevas posiciones en las regiones de Donetsk y Lugansk, según el último informe del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW).
Los bombardeos, sin embargo, han ido escalando en los últimos días y de hecho el lunes parecen haberse intensificado: los servicios de emergencia ucranios han informado de un . Servicios de Emergencia de Ucrania.bombardeo en un edificio residencial al noroeste de Kiev.
Las tropas rusas no llevaron a cabo operaciones de envergadura al noroeste de Kiev durante el domingo, según el ISW.
Esta aparente calma habría servido a las fuerzas del Kremlin para hacer un reconocimiento de las posiciones de los defensores y prepararse para lanzar nuevos ataques, según el ejército ucranio. Este lunes a primera hora al menos una persona ha muerto y otras 10 han resultado heridas en el bombardeo en un edificio de apartamentos del barrio Obolon, según las autoridades locales.
En el este del país, las fuerzas del Kremlin lanzaron el domingo varios ataques en el área que se extiende al norte de la ciudad cercada de Mariupol.
El ejército ucranio asegura que los rusos han tomado varias poblaciones, pero que ha podido contener la ofensiva invasora en Volnovaja, localidad de 21.000 habitantes arrasada por los bombardeos y situada entre el mar de Azov y la ciudad de Donetsk, a unos 65 kilómetros de Mariupol.
En el sur, el servicio de inteligencia británico asegura que Rusia ha establecido un bloqueo frente a la costa ucrania en el mar Negro, con lo que Ucrania ha quedado aislada del comercio internacional marítimo.
La fuerza naval rusa mantiene lanzamientos de misiles contra objetivos en tierras ucranias, informan los británicos, que tienen constancia de que el invasor ha tomado tierra en la costa del mar de Azov y prevé que haya nuevos desembarcos “en las próximas semanas”.
En el oeste, durante el fin de semana se han sucedido los bombardeos rusos contra instalaciones militares cerca de la frontera de Polonia.
Las autoridades ucranias aseguran que Rusia lanzó el domingo una treintena de misiles sobre unas instalaciones militares en Yavoriv, cerca de Lviv, la última gran ciudad en el oeste del país. Después de los ataques en Ivano-Frankivsk y Lutsk del viernes, fue la tercera ofensiva sobre una zona que hasta el pasado fin de semana había sido relativamente segura.